A partir del próximo viernes 14 de abril, el Señor de la Sagrada Resurrección estará en la capilla del colegio de la Salle-La Purísima, con motivo del 50.º aniversario de su bendición y primera salida de la imagen.
Por este motivo, se celebrarán una serie de actos y cultos en torno a la imagen, antes de que sea retirado del culto para su restauración.
Los actos y cultos del Señor de la Sagrada Resurrección en la capilla del colegio de La Salle
El viernes día 14, a las 20.30 horas, será la misa de acción de gracias por este aniversario. Predicará el Marcelino Manzano Vilches, delegado episcopal de hermandades y cofradías de Sevilla, y acompañará musicalmente el Grupo de Cámara Santa Cecilia.
Ya el sábado día 15, a las 10 y a las 12.30, de manera extraordinaria, el Señor de la Sagrada Resurrección acogerá las eucaristías de la Primera Comunión en el propio colegio. Ya el domingo día 16, de 11.00 a 14.00 y de 17.00 a 20.00 horas, estará expuesto en besapié extraordinario.
Ya del lunes 17 al miércoles 19 permanecerá en la capilla, al igual que hiciera desde 1973 hasta 1987.
La restauración del Señor de la Sagrada Resurrección
La Comisión Organizadora de la Hermandad de la Santa Cruz y Sagrada Resurrección encarga en marzo de 1972 a Francisco Buiza Fernández la talla de una imagen que representara la Resurrección de Jesucristo.
Realizada en pino de Flandes, el bloque escultórico mide 2,10 metros, sin la peana, y la imagen 1.74 metros. La imagen se bendijo el 14 de abril de 1973, Sábado de Pasión. El Domingo de Resurrección de ese año, 22 de abril, fue llevada en procesión por primera vez.
Ha conocido tres intervenciones: la primera fue en 1994, a cargo del profesor Juan Manuel Miñarro, quien llevó a cabo una limpieza general, comprobación de varias grietas y fisuras, y retoque de la policromía.
La segunda acaeció en 2008 por parte de Miguel Ángel Pérez Fernández y Ricardo Llamas León, que colocaron unos cajillos que mejoran la cogida de las potencias y causan menos daño a la imagen. La última tuvo lugar en enero de 2014 a cargo de Miguel Ángel Pérez Fernández, acometiendo una profunda limpieza de la policromía, que se había visto oscurecida tras el incendio intencionado de la puerta principal de Santa Marina de ese mismo año.