En este segundo fin de semana del mes de octubre fueron varias que hicieron sus respectivas salidas procesionales y rosarios. Entre ellas, el clasicismo de la Cena con la Virgen de la Encarnación o ese sabor a barrio en Pino Montano con la Virgen del Amor o del Rosario de San Jerónimo, entre tantas, además de las correspondientes veneraciones.
Las procesiones y rosarios del segundo fin de semana de octubre
Un año más, el barrio de San Jerónimo se llenó de fiesta y alegría para recibir a la Virgen del Rosario por sus calles.
A las 18.00 horas abría la puerta anexa a su parroquia para la salida del cortejo procesional, que contó con varias representaciones de diferentes corporaciones. Minutos después salió la imagen letífica de esta agrupación parroquial en su paso procesional. Musicalmente estuvo acompañado por la Banda de Música del Nazareno del Rota, estrenándose así tras la titular letífica en esta primera procesión en el barrio tras el comienzo de la pandemia.
Desde el Barrio León, la Virgen del Rosario realizó hizo un rosario vespertinopor las calles de su feligresía. Sustituye así a su procesión suspendida a causa de diferentes problemas económicos y también de seguridad. Manto azul y saya blanca para la imagen, donde en la delantera del paso llevó una gubia en memoria del imaginero Luis Álvarez Duarte.
Uno de los días más señalados para la Hermandad de Pino Montano fue ayer domingo con la celebración del rosario de la Virgen del Amor.
La dolorosa, que lucía manto rojo de brocado y saya azul bordada, fue portada por sus hermanos y devotos, cuyos momentos más destacados se pudieron ver en su visita al cuerpo de Bomberos, en la calle Lavanderas donde fue recibida por una petalá; y en la calle Tapiceros, adornada por un arco y guirnaldas de papel por parte de un grupo de hermanos de la corporación.
Ya a la tarde, la Virgen de la Encarnación de la Hermandad de la Cena hizo su salida desde la iglesia de los Terceros.
En una procesión de poco más de tres horas, estuvo por diferentes calles de su feligresía, luciendo manto y saya blanca. Los sones corrieron a cargo de la Banda de Música del Maestro Tejera.
Las veneraciones del segundo fin de semana de octubre
La Hermandad de la Macarena acogió la veneración en honor a la Virgen del Rosario. Para la ocasión, lució el manto celeste de Carrasquilla y saya blanca. Flanqueada por dos ángeles que portan un rosario, el conjunto se completa con varios centros y jarras de flores, predominando las rosas blancas, además de varios candeleros de cera blanca y algunas piezas de orfebrería a modo de altar, a los pies de la Virgen de la Esperanza.
Siguiendo por la calle Feria, la capilla de Monte-Sión albergóla veneración a la Virgen del Rosario. La imagen lució, bajo su dosel, su manto de salida y saya blanca bordada en esta ocasión. El exorno estaba formado por flores de distintas especies. Además se podía apreciar pequeños candelabros y candeleros de cera blanca.
Desde San Julián, la Virgen del Rosario estuvo expuesta a los pies del altar mayor, que lo presidía el sillón de la realeza. Manto bordado en terciopelo azul y saya blanca bordada lucía la talla de Castillo Lastrucci. El exorno estuvo conformado por flores de distintas especies, completando el conjunto con varios candeleros y candelabros de cera blanca.
Desde la capilla de la Puerta Real, tanto el sábado como el domingo, la Virgen de las Mercedes permaneció también este culto interno. En un sencillo montaje, la imagen lució manto de terciopelo azul marino bordado, saya blanca y ráfaga, flanqueada por dos jarras de flores y sendos faroles hacheros de cera blanca.
Las Aguas también expuso a su titular letífica, a la Virgen del Rosario en veneración. La imagen estuvo a los pies del altar escoltada por dos candelabros.
Otra de las imágenes que estuvieron expuestas para este culto fue la Virgen del Amor de la Hermandad de Pino Montano. Al igual que en el rosario, lució su manto rojo de brocado y saya de terciopelo azul.
Para finalizar, en Sevilla Este estuvo expuesta en veneración la Virgen del Rosario y Esperanza en su parroquia de la Asención. Llevó un manto de vistas y saya bordada, ambas en terciopelo azul. Tras la imagen se pudo ver el sillón de la Realeza de María.
Fotografías y vídeos: Carlos Iglesia, Ángela Vilches, Benito Álvarez y Antonio Barrera.