A lo largo de este jueves 17 de julio, se han suscitado numerosas informaciones al respecto en torno a los varales del paso de palio de la Virgen de la Esperanza Macarena.
El oscurantismo y hermetismo de la junta de gobierno presidida por José Antonio Fernández Cabrero, y a la carencia de una voz oficial, da pie a todo tipo de especulaciones y mala praxis de la comunicación institucional al respecto, y en una nula información concisa hacia los hermanos.
¿Qué ocurre con los varales del palio de la Macarena?
Tal y como informó este medio en la mañana de este jueves, los varales del paso de palio fueron llevados la pasada semana al taller de los hermanos Delgado, tal y como aseguran numerosos testigos presenciales. Cabe destacar que no se trata de las habituales tareas de mantenimiento que se vienen haciendo después de Semana Santa.
Estos varales se encuentran en estos momentos en el tesoro devocional de la basílica. Pero nada más lejos de la realidad.
Fuentes internas de la hermandad han asegurado a este medio que los varales se encuentran en un estado «irreversible«. Las primeras informaciones apuntaban que era por un mal montaje, pero lo que se puede conocer es que el origen de los mismos se debe a los numerosos cambios de los vástagos que se han producido a lo largo de los años. «Tras la estación de penitencia llegaron totalmente reventados«, declararon a este medio
Por lo tanto, este traslado no se ha informado a los hermanos y tampoco se les ha hablado del estado de los varales.
Un capítulo más en la triste gestión de la hermandad, sin que los hermanos tengan algún tipo de información al respecto de nada.
