Día para la historia para el barrio del Polígono Sur en este domingo 2 de junio.
El arzobispo José Ángel Saiz Meneses ha decretado como nueva hermandad de penitencia a la hasta ahora Agrupación Parroquial de Bendición y Esperanza. Así lo ha firmado el pasado 24 de mayo, en la festividad de María Auxiliadora.
Será la hermandad de penitencia número 71 en la capital hispalense, y tendrá como título completo: ‘Hermandad Salesiana y Cofradía de Nazarenos Nuestro Padre Jesús de la Bendición en el Santo Encuentro con Santa María de la Esperanza en su Soledad y Nuestra Señora de la Humildad y Caridad, Sal y Luz’.
Además, se han aprobado sus nuevas reglas por parte de la autoridad eclesiástica.
Nazarenos en el Polígono Sur para el Polígono Sur
Por lo tanto, para el próximo año 2025 saldrán nazarenos desde el Polígono Sur. El hábito comprende túnica y capa blanca con antifaz verde, botonadura negra y cíngulo trenzado negro y verde.
En este sentido, se incorpora a la nómina de hermandades de vísperas de la Semana Santa para hacer estación de penitencia el Viernes de Dolores. Su delegado parroquial es Ángel Hartmann y el censo de hermanos asciende a unos seiscientos.
Bendición y Esperanza y su historia
Sus inicios como asociación civil radican en el año 1992. Ya en 2005 se convierte en una asociación de fieles, amparadas por la propia parroquia de Jesús Obrero, siendo ya nombrada como agrupación parroquial en 2012. Conservan su denominación de ‘Sal y Luz’ desde los orígenes de esta entidad.
Sus imágenes titulares son el Señor de la Bendición en el Santo Encuentro y Santa María de la Esperanza en su Soledad. Realizadas por Juan Antonio Blanco, fueron bendecidas el 21 de febrero de 2010.
Ese mismo año hicieron su primera salida procesional, sustituyendo a las anteriores imágenes, junto a las tallas de Santa María Magdalena y San Juan Evangelista. En 2011 se completó el misterio con dos soldados romanos y un judío relator, todas ellas ejecutadas por el mismo imaginero. Representa la escena del encuentro del Señor con su madre en la calle de la Amargura.
Fotografía: Hermandad de Bendición y Esperanza.
