La Hermandad de la Esperanza de Triana se encuentra inmersa en la reforma de la nave de la epístola de la capilla de los Marineros, para dotarla de una nueva disposición, ornamentación y una mejor accesibilidad.
Por todo ello, y aprovechando los últimos días de Cuaresma y los de Semana Santa, la corporación de la calle Pureza habilitó esta zona ante la gran afluencia de fieles y público en general para contemplar a los titulares en sus respectivos pasos procesionales.
Una zona en la que no se encontraba el retablo del Cristo de las Tres Caídas, debido a los trabajos de intervención y de dorado que se vienen haciendo, al igual que las nuevas ubicaciones que se situarán en ella, como la sacristía.
Las obras de la nave de la epístola
El principal trabajo que se viene haciendo es el proyecto de dorado del retablo del Cristo de las Tres Caídas, así como la intervención y reforma de la nave sacramental de la capilla de los Marineros. Los trabajos se están desarrollando bajo la dirección artística de Francisco Javier Sánchez de los Reyes y José Ignacio Sánchez Rico, y con la dirección técnica de los arquitectos Aurelio Gómez de Terreros Guardiola y Rafael Galiano Rodríguez.
De igual modo, se intervendrá el camarín del Cristo de las Tres Caídas para dotarlo de las mismas condiciones de seguridad contra incendios de las ya instaladas en el de la Virgen de la Esperanza con un margen de seguridad de 120 minutos. Por otra parte, se disminuirá la altura a la que se encuentra ubicada la talla en su retablo, para garantizar un mayor acercamiento a los fieles, así como la ampliación de la embocadura del camarín para garantizar una mejor visión del Cristo de las Tres Caídas
Para dotar de forma de cruz latina la planta de la capilla de los Marineros, arquitectura usada en los templos católicos, cuya nave central es de mayor longitud que el transepto, el altar del Santísimo Cristo pasará a presidir la nave de la Epístola. Para ello, se procederá al adecentamiento para el culto de la nave sacramental, dotándola de una nueva ornamentación acorde en estética y arquitectura con el resto del templo, la cual incluirá dos nuevas balconadas.
Se ampliará y se trasladará de la sacristía desde su actual ubicación a la zona en la que actualmente se ubica el retablo del Cristo de las Tres Caídas y se construirá un nuevo columbario. Para finalizar, se hará un nuevo ropero para albergar el ajuar de sus titulares.
Fotogalería
Fotografías: Carlos Iglesia.
