El secretario de Estado de Memoria Democrática, Fernando Martínez López, ha enviado a primera hora de este lunes día 24 una carta al hermano mayor de la Hermandad de La Macarena, José Antonio Fernández Cabrero, para que proceda a dar cumplimiento con la Ley de Memoria Democrática mediante la exhumación y posterior traslado de los restos de los generales Gonzalo Queipo de Llano y Sierra y de Francisco Bohórquez Vecina.
Según recoge la carta, esta nueva norma «pretende cerrar una deuda de la democracia española con su pasado y fomentar un discurso común basado en la defensa de la paz, el pluralismo y la condena de toda forma de totalitarismo político que ponga en riesgo el efectivo disfrute de los derechos y libertades inherentes a la dignidad humana».
La respuesta de la Macarena
En este sentido, la Hermandad de la Macarena ha emitido un comunicado. En ella recoge que la propia corporación ya trabaja «en la ejecución de aquello que la nueva Ley establece».
De igual modo, reiteran su voluntad de cumplir «escrupulosamente con la legislación vigente». Así lo ha trasladado también el hermano mayor, José Antonio Fernández Cabrero, a la Secretaría del Estado de Memoria Democrática.
La ley de Memoria Histórica
La misiva hace hincapié en que el objeto de la ley de Memoria incluye el reconocimiento de quienes «padecieron persecución o violencia, por razones políticas, ideológicas, de pensamiento u opinión, de conciencia o creencia religiosa, de orientación e identidad sexual, durante el período comprendido entre el golpe de Estado de 18 de julio de 1936 y la entrada en vigor de la Constitución de 1978».
Y en concreto, hace alusión al artículo 38.3 que establece que «los restos mortales de dirigentes del golpe militar de 1936 no podrán ser ni permanecer inhumados en un lugarpreeminente de acceso público, distinto a un cementerio, que pueda favorecer la realización de actos públicos de exaltación, enaltecimiento o conmemoración de las violaciones de derechos humanos cometidas durante la Guerra o la Dictadura».