Se cierra el mes de mayo con varias procesiones en la capital hispalense. Entre ellas, destaca la de María Auxiliadora Coronada, la Virgen de la Alegría o la Pastora de Capuchinos, culminando así esta jornada.
Las procesiones del quinto fin de semana de mayo
El pasado viernes día 27, la Virgen del Amor Hermoso procesionó por las calles de Nervión. Lo hizo desde el colegio de San Juan Nepomuceno, con los sones de la Banda de Música Juvenil de las Cigarreras
Día grande en la comunidad salesiana de la Trinidad. El pasado sábado 28 de mayo realizaba su salida procesional tanto la imagen de San Juan Bosco como de María Auxiliadora. Un cortejo donde estuvieron acompañados por los alumnos del centro educativo.
Cabe destacar su saludo tanto al colegio de San Juan Bosco como a la Hermandad de los Gitanos, además de su transitar por la calle Sol, a la vuelta. La Agrupación Musical de Nuestro Padre Jesús de la Salud de los Gitanos y la Banda de Música de Nuestra Señora de la Victoria de las Cigarreras interpretaron sus sones tras ambos pasos procesionales.
En San Jerónimo tuvo lugar la salida procesional de la Virgen de Belén. Se trata de la primera que lo hace por las calles de este barrio, tras haberlo por las calles del entorno de la Alameda de Hércules hasta hace diecisiete años.
Lo hizo desde la parroquia del Rosario, ya que la suya no podía hacerlo por las reducidas dimensiones de la puerta. Le acompañó musicalmente la Banda de Música Ciudad de Dos Hermanas.
La Virgen del Prado recorrió las calles del barrio del Porvenir. En un cortejo formado por niños y hermanos de la Paz transcurrió la comitiva, que contó con el acompañamiento, al igual que el Domingo de Ramos, con la Banda de Música de Santa Ana de Dos Hermanas. Pasó en esta ocasión por el parque de María Luisa.
Y para cerrar el sábado 28 demayo, se efectuó la salida de la Virgen de los Desamparados del barrio sevillano de Parque Alcosa. La imagen portó la saya de terciopelo burdeos, bordada por Manuel Solano, réplica de la que fue robada el pasado año 2018. Como cada año visitó a la vecina corporación del Divino Perdón en su discurrir procesional. La Banda de Cornetas y Tambores Pasión de Cristo abría el cortejo mientras que tras la imagen lo hacía la Banda de Música Municipal de la Puebla del Río.
En la mañana del domingo tuvo lugar el rosario de la aurora de la Virgen del Pilar por la feligresía, para posteriormente estar dispuesta en veneración. También hubo varias procesiones eucarísticas en San Gil, San Lorenzo, Juncal y Torreblanca.
Ya a la tarde, la imagen de María Auxiliadora del Polígono Sur hizo su salida por las calles de su barrio, junto a San Juan Bosco.
En el barrio de Juan XXIII tuvo lugar la procesión de la Virgen de la Anunciación. En esta ocasión en el cortejo contó con las representaciones de varias corporaciones. Discurrió por las calles de su barrio con los sones de la Banda de Música de las Angustias de Sanlúcar la Mayor.
También tuvo lugar la procesión de la Virgen de la Alegría, desde la parroquia de San Bartolomé. Esta imagen letífica recorrió las calles del barrio de la antigua judería. Además de su salida y entrada, uno de los momentos más destacados fue su saludo a la Hermandad de la Candelaria en San Nicolás. Contó con los sones de la Banda de Música de Nuestra Señora de la Victoria de las Cigarreras.
Uno de los días marcados para todos los vecinos de la avenida de la Cruz Roja fue la salida de la Pastora de Capuchinos, que este año visitó San Julián. Numeroso público pudo presenciar su transitar, y en especial en la calle Antonio Machín, donde a la imagen se le canta unas sevillanas desde el balcón y se le realiza una gran petalá a los sones de ‘Pasan los Campanilleros’. La Agrupación Musical de María Santísima de las Angustias Coronada y la Asociación Filarmónica de las Nieves de Olivares puso los acordes a esta procesión.
Las veneraciones del quinto fin de semana de mayo
Desde Triana, la Virgen del Desconsuelo y Visitación, de la Hermandad de Pasión y Muerte recibía a sus fieles en veneración Vestía un manto azul marino al igual que la saya, también bordada. Flores blancas y candelabros de guardabrisas flanqueaban a esta dolorosa de Navarro Arteaga.
Siguiendo en Triana, tuvo lugar la veneración de Madre de Dios del Rosario. La imagen portaba su manto burdeos bordado y saya blanca para la ocasión. Tras la imagen estaba el simpecado de la entidad presidiendo su capilla. Un exorno a base de flores de tonalidad blanca, ángeles y hacheros con cera blanca completaba el conjunto elaborado por el equipo de priostía de la corporación.
Fotografías y vídeos: Carlos Iglesia, Rodo Janeiro, Antonio Barrera y Benito Álvarez.