La sede del Consejo de Hermandades y Cofradías, sita en la calle San Gregorio, se ha visto obligado a cerrar sus puertas de manera indefinida, tras producirse un caso de COVID-19 en uno de los empleados.
Esta persona tiene por el momento síntomas leves y el resto han dado negativo en las pruebas. Estas dependencias ha sido desinfectada con ozono.
Por lo tanto, se suspende todas las actividades allí previstas, incluido la muestra de la pintura de ‘Jesús Nazareno’ de Valdés Leal, perteneciente a la Hermandad de San Bernardo, y que comenzó el pasado miércoles 28 de octubre.
Cierre de varios templos
Este hecho se produce tras conocerse el cierre por quince días de la capilla de la Pastora de Santa Marina por otro positivo en COVID-19.
Cabe recordar que hace unas semanas, ocurrió un caso similar en la Hermandad de San Pablo, coincidiendo con el triduo en honor a la Virgen del Rosario. El templo tuvo que cerrar y este culto se realizó a puerta cerrada y se emitió a través de las redes sociales de manera streaming.
Además también se ha cerrado, como previsión varias casas de hermandades en diferentes corporaciones.
