El pasado fin de semana estuvo marcado por los besamanos en honor a la advocación de la Esperanza, destacando el de la dos grandes devociones marianas de la ciudad: la Macarena y la Esperanza de Triana. Además de estos cultos internos la capital hispalense también acogió una salida procesional, un traslado y un rosario de la aurora.
El rosario de la aurora del Rocío de Sevilla
La mañana del sábado 16 de diciembre tuvo lugar el rosario de la aurora del simpecado de la Hermandad del Rocío de Sevilla. Hizo su salida pasadas las 08.30 horas desde la iglesia colegial del Divino Salvador y estuvo acompañado por sus hermanos y fieles.
Además del rezo de los misterios gozosos del Santo Rosario, también se le cantó algunas sevillanas en su discurrir por las calles de su feligresía.
La salida procesional de la Inmaculada del Corpus
Llegado a la tarde, a las 16.30 horas, la Inmaculada de la Hermandad Corpus hizo su salida procesional, como culminación de sus cultos.
Uno de los momentos más destacados es su visita al hospital Virgen del Rocío, discurriendo además por el barrio de Bami. Estuvo acompañada musicalmente por la Banda de Música de la Cruz Roja, con marchas como ‘Coronación de la Macarena’, o ‘Mi Amargura’, entre otras, hasta su regreso a su sede canónica.
El traslado de la Virgen de la Encarnación de San Benito
Como viene siendo tradicional, la Virgen de la Encarnación de la Hermandad de San Benito trasladada a la vecina residencia de ancianos de las Hermanitas de los Pobres.
A las 18.00 horas, se abrieron las puertas de su sede para dar comienzo de este acto. La imagen estuvo portada en andas por sus hermanos con un exorno basado en flores de tonalidad rosácea. En escasos minutos, discurrió por los jardines y fue llevada a la capilla de este asilo, donde se celebró a la mañana siguiente una eucaristía en su honor. Ya el mismo domingo 16 de diciembre, regresó de nuevo a su sede canónica.
