Que no restauren mi faz
Rey San Fernando // ¡Dios me libre de barnices del siglo XXI!
Rey San Fernando // ¡Dios me libre de barnices del siglo XXI!
Rey San Fernando // ¡Oh Sevilla mía, tan perfumada de nardo y de incienso, tan llena de luz aunque duela la sombra!.
Rey San Fernando // A la Gloria de Dios, Señor de los ejércitos celestiales.
Rey San Fernando // ¡Oh lengua santa que no quema sino que da voz a lo eterno!
Rey San Fernando // Y que nunca olvide Sevilla que, una madrugada de mayo, la Amargura y la Cruz no se cruzaron: se fundieron.
Rey San Fernando // Firmado con puño real, Yo, Fernando, Rey y Santo, morador eterno catedralicio.
Rey San Fernando // ¡Oh, prodigio de los tiempos!
Rey San Fernando // Bienvenido, Santo Padre León XIV, a la historia eterna del pueblo de Dios.
Rey San Fernando // ¡Cuánto me duele saberla ausente!
Rey San Fernando // «Descansa eternamente en paz y que tu alma se sienta gozosa por la tarea cumplida».
Rey San Fernando // En el nombre de Dios, Uno y Trino, que reina en los cielos eternamente:.
Rey San Fernando // “Zaqueo, baja en seguida, porque hoy tengo que quedarme en tu casa”.