Tras el cierre de puertas de la basílica en la noche del pasado martes 12 de agosto, fue retirada del culto la Virgen de la Esperanza Macarena para ser sometida a una restauración por parte de Pedro Manzano y con la supervisión del IAPH y con sendas comisiones de trabajo y de seguimiento de estos trabajos, aprobada el pasado martes 29 de julio.
En este sentido, Pedro Manzano ha emitido un comunicado al respecto, afrontando esta responsabilidad y respeto, siendo «consciente del valor artístico, histórico y devocional» de la Reina de San Gil.
Su objetivo será «devolver a la Virgen su integridad estructural y expresiva, preservando esa esencia barroca del siglo XVII y sobre todo esa mirada tan reconocible y singular que ha trascendido por generaciones.»
El comunicado de Pedro Manzano
Queridos hermanos y devotos de la Esperanza Macarena:
Tras la decisión tomada por amplia mayoría en el Cabildo General Extraordinario celebrado el pasado 29 de julio de 2025, me ha sido encomendada la restauración de Nuestra Madre y Señora de la Esperanza. Afronto esta responsabilidad con profundo respeto, consciente del valor artístico, histórico y devocional que Ella representa para Sevilla y para todos sus fieles.
Sé que su ausencia temporal genera un sentimiento de anhelo en Sevilla y en todos los rincones donde Ella es querida. A lo largo de los próximos meses, esta labor y el compromiso que implica, podrá constituir un tiempo de unión y esperanza, pues tengo un objetivo claro y prioritario: devolver a la Virgen su integridad estructural y expresiva, preservando esa esencia barroca del siglo XVII y sobre todo esa mirada tan reconocible y singular que ha trascendido por generaciones. En cada paso pondré toda mi atención, esmero y entrega, con rigor técnico, sensibilidad artística, devocional y un profundo respeto por la Imagen, cuyo significado es tan profundo e inestimable para miles de personas en Sevilla y en todo el mundo.
La Esperanza nos mantiene firmes en la prueba y nos fortalece en la espera. Confío en que su regreso al culto llenará de alegría a todos los que la esperan, reavivando la Fe, y con ello, estrechando aún más el vínculo entre quienes la veneran. Gracias a la Junta de Gobierno por proponerme para esta bonita tarea y, cómo no, gracias a los hermanos por la confianza que me habéis depositado en esta difícil decisión, y por la devoción que sigue unida en torno a Ella.
Con afecto y compromiso, Pedro Manzano.
