Una de las grandes reformas llevadas a cabo en los últimos años de los templos ha sido el de la capilla de la Estrella, que en este próximo año 2026 celebra su 50.º aniversario.
Trabajos que incluyeron tanto la capilla como la casa hermandad situada en la planta superior obligaron durante casi dos años al traslado del Cristo de las Penas y de la Virgen de la Estrella. Estas obras se llegaron a parar temporalmente a causa de la pandemia del Covid. Ya en la antesala de la Semana Santa de 2021, los titulares regresaron a su capilla de manera privada.
Está reforma fue aprobada en cabildo de hermanos durante el mandato de Manuel González al frente de la entidad.
Las obras en la capilla y la casa hermandad de la Estrella
Así, la capilla se presentó como un espacio de culto diáfano, con excelente visión de los camarines de los titulares, a la vez que se respeta el proyecto decorativo original de Delgado Roig. Se ha logrado igualmente tener una clara visión del espacio central que ocupará la mesa de altar.
Presenta la nueva puerta de acceso directo a la calle Nuestro Padre Jesús de las Penas, así como con la iluminación natural aportada por los óculos abiertos hacia dicha calle lateral. Se valora también de manera positiva el aprovechamiento del espacio ganado a la capilla, la ubicación de la tienda y el coro.
Respecto de la casa hermandad, hay que resaltar la iluminación y ventilación natural que aportan los patios abiertos hasta la planta primera, los nuevos espacios creados con la ampliación y la funcionalidad general, a la que se le han añadido los valores de una arquitectura más contemporánea y funcional.
Se instala un ascensor, vitrinas con un espacio expositivo y un espacio para las distintas reuniones y convivencias, con una barra de bar.
Graves deficiencias en las obras
Por desgracia, no es oro todo lo que reluce y estos trabajos provocaron una gran desviación presupuestaria, es decir, hubo una gran diferencia entre el importe real y el aprobado inicialmente en cabildo de hermanos. Incluso, con Manuel González aún de hermano mayor, se celebró un cabildo de hermanos para proponer una cuota extra de las obras, punto que fue ‘tumbado’ por parte de los hermanos.
Ya con la actual junta de gobierno encabezada por Carlos Martín, tuvo que hacer frente a la deuda que había contraído la anterior junta de gobierno.
A todo ello se tuvo que añadir las graves deficiencias en estos trabajos. Se detectaron humedades en la parte superior de los camarines, en especial de la Virgen de la Estrella afectando a su ropero.
De igual modo, los camarines carecían de las medidas de seguridad necesarias, ya que no se había instalado una cortina ignífuga antiincendios, algo que estaba recogido en el presupuesto inicial y que, por causas que se desconocen, no se había hecho. Además de la realización e instalación de la misma, se cambió de lugar la alarma antiincendios, ya que se dispuso en una zona muy visible de ambos retablos.
Todas estas labores han tenido que ser subsanadas por parte de la actual junta de gobierno, donde además ha conseguido subsanar en estos cuatro años la deuda contraída.
Por todas estas cuestiones, el actual hermano mayor ha anunciado que la hermandad ha tomado acciones legales contra la dirección y el arquitecto de la misma. Se ha fijado una audiencia previa para el mes de mayo del próximo año 2026.
Además, se han hecho otras mejoras a lo largo de los últimos cuatro años. Entre ellas destaca la instalación de un altar para el Lignum Crucis con pinturas de Raúl Berzosa, y el enriquecimiento de ambos camarines con pinturas de Rubén Terriza.
