Por desgracia, las hermandades de la ciudad han sufrido en estos últimos años diferentes robos en su patrimonio artísticos. Desde joyas y piezas de orfebrería hasta sayas o incluso imágenes han sido sustraídas de sus dependencias o de sus templos, sin que, en la mayoría de los casos, se conozca actualmente su paradero.
No es un fenómeno aislado ya que a lo largo de la historia se han llevado a cabo estos hurtos, obligando a las corporaciones en mejorar su seguridad.
El robo de las joyas de la coronación de la Virgen de la Palma del Buen Fin
En el año 2005, en concreto en el domingo 6 de noviembre, cinco personas irrumpieron en la casa hermandad del Buen Fin armados con navajas donde amenazaron al mayordomo segundo y le llegaron a asestarle una puñalada en la mano.
Los ladrones se llevaron las tarjetas de crédito del mayordomo y se llevaron 1,500 euros de la recaudación de la Lotería de Navidad y del ambigú. Dos días después notaron la desaparición de algunos enseres, como broches provenientes de donaciones por la coronación de la Virgen de la Palma e incluso la medalla de la ciudad.
Los autores fueron identificados y se descubrió que uno de los hermanos propició este robo.
Robo del Niño Jesús del Calvario
En febrero del año 2008, cuando sus titulares presidían el altar de quinario, desapareció de la capilla de la Hermandad del Calvario una imagen del Niño Jesús, con una cruz de plata. Al parecer, la cancela estaba cerrada pero el candado abierto.
Se cree que esta imagen desapareció tras la celebración de una boda en la parroquia de la Magdalena.
Oleada de robos en el verano del año 2008
El verano del año 2008, distintas parroquias sufrieron una oleada de robos, y conllevó finalmente a la detención de una banda de delincuentes de nacionalidad rumana que perpetró estos hechos.
El primero de ellos fue a la parroquia de San Luis y San Fernando de Rochelambert el 13 de julio, donde destrozaron el sagrario y varias puertas de la iglesia y sustrajeron tres portaviáticos y un viril. El día 15 ocurrió similar en un templo de San Juan de Aznalfarache, donde forzaron los velilleros y se llevaron la recaudación de un mes.
El día 20 de ese mismo mes, entraron en la parroquia de San Isidro Labrador de Pino Montano y robaron tres ordenadores, reventaron dos cajas fuertes y se llevaron 3.650 euros en efectivo del grupo joven de la hermandad y destinado a obras de caridad, además de la llave del sagrario con la cadena de plata, unos portaviáticos de plata y dorados y dos broches de oro.
El último de ellos ocurrió el 26 de julio en la parroquia de San Juan de la Cruz y el Buen Pastor de Padre Pío, donde fueron sorprendidos por la Policía a las 04.30 horas. Utilizaban el mismo modus operandi: usaban gatos hidráulicos para forzar rejas y ventanas, palancas y cuerdas para escalar y se llevaban donero y joyas que se podían vender.
Robo de joyas a la Virgen del Amparo de la Misión
Similar al robo que ocurrió en la Sed en 2020 le pasó en 2009 a la Misión. Ese 11 de abril, unos ladrones Unos ladrones se descolgaron por una ventana y llevaron la caja fuerte con las joyas de la Virgen del Amparo, además de dinero en metálico y unos escapulario a la imagen del Inmaculado Corazón de María.
El robo de las bambalinas de plata y las águilas bicéfalas de las Siete Palabras
Uno de los robos más sonados fue el que sufrió la Hermandad de las Siete Palabras. En la madrugada del 19 de enero del año 2012, unos ladrones entraron en su almacén de la calle Medalla Milagrosa y sustrajeron dos águilas bicéfalas y una cartela del paso del Señor de la Divina Misericordia y las antiguas bambalinas del paso de palio de orfebrería Villarreal.
Según apuntaron algunos testigos, al menos tres individuos rompieron con fuerza la puerta en torno a las 01.30 horas y se llevaron estas piezas que no han llegado a recuperar. Incluso de las águilas, la corporación ha tenido que hacer sendas réplicas y que fueron estrenadas en la Semana Santa del pasado año 2019.
Los robos en San Isidoro, la Macarena, el Santo Ángel y en la Resurrección
Ya el 28 de agosto de 2014, la Hermandad de las Tres Caídas de San Isidoro sufrió un robo de patrimonial en su propia parroquia. Desaparecieron dos imágenes de madera policromada que estaban situada en el altar de la imagen del nazareno. Se trata de dos tallas de unos diecisiete centímetros de San Francisco Javier y San Francisco de Borja que fueron arrancadas de la hornacina donde estaban.
El 9 de enero del año 2015 la Policía encontró una jarra perteneciente al antiguo paso de palio de la Virgen de la Esperanza Macarena, cuyo autor fue detenido.
El 31 de agosto de ese mismo año, la Hermandad del Carmen del Santo Ángel denunció la sustracción de varias piezas de orfebrería. Este suceso tuvo lugar en el mes de agosto de ese año y por el momento no han sido recuperados. Uno de los proyectos de la entidad es la realización de una nueva tiara réplica de la desaparecida.
Ya en 2017, en concreto el 10 de mayo, la corporación de la Resurrección denunció el hurto de varios broches que portaba la Virgen de la Aurora en aquel momento en su capilla de la iglesia de Santa Marina. Por fortuna la imagen no sufrió de ningún tipo de daño.
El robo de las sayas en los Desamparados de Parque Alcosa
El 1 de marzo del pasado año 2018, se sustrajo dos sayas de la imagen y dos broches de los faldones. En el caso de las dos piezas de atavío de la dolorosa, estaban bordadas en aplicación con soporte burdeos y blanco ejecutadas por Manuel Solano, utilizadas en su salida procesional, desconociéndose en la actualidad su paradero.
Su hermano mayor Álvaro Jiménez declaró que “el local se encuentra colindante al almacén de un bar. La cocinera se dio cuenta que la puerta del almacén estaba abierta a las 12.00 horas y dio la voz de alarma. El bar cerró ayer a las 21.00 horas, así que estimamos ese intervalo de horas, que se produjera el robo”. Estos hechos fueron ya denunciados ante la Policía, sin que de momento haya ningún resultado.
Los robos producidos en 2020
2020, en pleno año de la pandemia, varias hermandades sufrieron sendos robos.
Una de ellas fue en el Calvario. El 20 de febrero de ese año uno o varios individuos asaltaron las dependencias de la corporación y sustrajeron el dinero en efectivo proveniente de la diputación de caridad. Por fortuna, no hay que lamentar la desaparición de ningún elemento de su patrimonio artístico.
En el caso de la Hermandad del Rocío de la Macarena denunció el robo de dos de sus medallas que se encontraban en el simpecado, entre el viernes 29 y en la mañana de este domingo 31 de mayo.
Además hubo dos intentos de asaltos. Uno de ellos en la capilla de los Negritos, donde un asaltante fue soprendido robar, encontrándose en las dependencias de la casa hermandad, siendo finalmente detenido el 9 de diciembre.
Al día siguiente, el día 10, el hermano mayor de la entidad, Andrés Martín Angulo, se encontraba en las inmediaciones y vio a una persona encaramada en la fachada. Tras intentar interpelar con el asaltante, éste se marchó del lugar.
El robo de la Sed
Uno de los peores robos, junto con el de las Siete Palabras de 2012, fue el de la Sed el 27 noviembre de 2020.
Al mediodía la corporación se percató de todo lo ocurrido. Al parecer rompieron los barrotes del balcón, sonaron las alarmas pero fueron emitió ningún aviso a la central de seguridad.
Llegaron a tirar la caja fuerte por el balcón para romperla y recoger todos los elementos que custodiaba. Se llevaron más de una treintena de ellas, como el barco que porta la Virgen de Consolación, las potencias del crucificado y la cruz pectoral, además de varios broches y medallas.
El teniente hermano mayor Juan de las Cuevas explicó que tienen “contratado un sistema de seguridad con una empresa puntera en el sector que nosotros pensábamos que era de alta eficacia. De ello, los sistemas de seguridad que tenemos han funcionado: la alarma saltó, las cámaras grabaron… Lo que pasa que no hemos tenido respuesta del centro de seguridad, de donde atienden las 24 horas las incidencias“.
Cabe destacar que en la casa hermandad existen más de veinte puntos de vigilancia entre sensores de movimientos, cámaras de seguridad y está conectado a una central de alarmas 24 horas. “Hemos solicitado un informe con las incidencias registradas en esa jornada y a día de hoy estamos esperando a que nos digan algo“.
“Si es cierto que cuando se perpetra el robo, la alarma salta, cumple con su objetivo, espanta a los ladrones, salen corriendo, pero por no haber una respuesta proactiva de la central de alarma nos han robado todo lo demás. Si a nosotros nos avisan o al listado de personas de donde tenemos la gestión y nos llaman por teléfono que han entrado en la casa hermandad no se llevan absolutamente nada. El problema es que aprovechan del centro operativo que no nos avisan y se llevan todo“, matizó.
Entre las piezas robadas, además del barquito estuvieron las cruces pectorales de Bueno Monreal y Amigo Vallejo, la granada de oro del hospital San Dios, numerosos rosarios y broches, la medalla de la ciudad, un puñal y el juego de potencias del Cristo de la Sed, entre otras.
Al año siguiente, se detuvieron a tres personas como presentan autoras de este robo, pero finalmente quedaron absueltos.
Ya el pasado 1 de febrero de 2023, la hermandad dio a conocer que el barquito de la Virgen de Consolación ha aparecido. Una mujer llamó diciendo que lo tenía en su domicilio de un pueblo cercano a Mérida, tras reconocerlo su hijo. Fue recogido días atrás de casa de su cuñada tras haber fallecido recientemente.
Las joyas y piezas sustraídas en las Siete Palabras
La Hermandad de las Siete Palabras ha sido una de las más damnificadas en estos últimos años.
El 18 de octubre de 2021, comunicó que se han sustraído varias piezas de orfebrería, de plata, pertenecientes a la Virgen de la Cabeza Gloriosa, situada en la capilla sacramental de San Vicente.
Unos días antes se detectó la desaparición de tres potencias del Niño Jesús que porta en su mano izquierda y la rosa que lleva en su mano derecha. Estos hechos fueron puestos a disposición a la Policía Nacional, donde se han realizado las pesquisas convenientes, además de dar parte del siniestro a la compañía aseguradora.
Un año después, el 27 de octubre de 2022, uno o varios individuos entraron en la casa hermandad de la corporación y han robado dinero y varios enseres. Las primeras informaciones indicaron que se tratan de algún broche, lotería y alimentos, extremo que de momento la hermandad no ha confirmado, a la espera del informe por parte de la Policía Científica. Además han ocasionado múltiples destrozos.
El último robo, en el Rosario de San Jerónimo
El último de ellos ha ocurrido en la Agrupación Parroquial del Rosario de San Jerónimo el pasado 20 de agosto.
Así lo ha comunicado la propia corporación del Sábado de Pasión, en la cual se han producido importantes daños y se han sustraído bienes de la entidad. Estos hechos han sido ya denunciados ante la Policía, a la espera de la aclaración de los hechos.
