Publicado por Tambores lejanos, nada de taconeo, se oyen. Ecos del tercer o cuarto rebote ondulatorio entre Capillas y pilares catedralicios acerca de las vacaciones de la familia Real.
Multitud pensarán que habitan en unas vacaciones constantes salvo que cambian de residencia para que se les hagan más amenas las mensualidades vividas, no como este Rey Santo que no se detiene en sus esfuerzos.
Palma de Mallorca, Palacio de Marivent, vistas colosales, fuentes repletas de la mejor macedonia como ágape de bienvenida e infantes de sangre añil que jamás dieron un palo al agua, aún, dejando atrás los pololos para aferrarse al copón inundado de trozos de icebergs y líquidos animosos. Mientras, el sabio de mi primogénito quedando en el olvido por culto, por exceso de inteligencia y cultivado. Hasta la Realeza posee distinciones.
Este Rey Santo, a pesar de los golpes estruendosos de calor se aferra a mantener su estancia constante. De mi Urna no me moverán, versaban los infantes ciclistas de aquel serial donde su Rey era a un vetusto marinero vendedor de humo en un cuatro latas flotante y éste que manuscribe suscribe ese cantar reivindicativo. De Sevilla no me moverán!!
Post scriptum: si los nietos reales y no santos precisamente supieran del parque acuático que este Rey sí Santo se monta en su urna acristalada, con toboganes desde los altos catedralicios, jacuzzi con tres celeridades de burbujeo, rampa con donut al que aferrarse, zona de baño climatizado para compensar los gradientes térmicos y todo combinado con un meyba y mis chorreras de más de un millar de rayas, estoy en la certeza plena que abandonan padres y abuela y se vienen a gozar al reino de la luz y del color.
Marivent, ni Marivent…!!!
Sean felices.
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