Las medidas de confinamiento y aislamiento con motivo del estado de alarma decretado en el país a causa del coronavirus, no son ajenas a determinados cultos y actos propios de la Semana Santa.
En este sentido este pasado domingo 5 de abril, la Policía interrumpió e impidió que se continuara con una eucaristía en la azotea del convento de los Paúles.
Una misa en la azotea del convento de los Paúles
Estos hechos ocurrieron en torno a las 13.30 horas, en la misa del Domingo de Ramos. Tal y como ha podido conocer este medio, cuando se estaba efectuando el ofertorio, varios agentes llegaron al lugar, subieron a la azotea de este templo y notificaron que no podían seguir con la eucaristía, con una posterior sanción a todos los allí presentes.
Cabe destacar que todas las personas que estuvieron en ella son religiosos pertenecientes a esta congregación y viven allí, guardando además cada uno la correspondiente distancia entre unos y otros. De igual modo, hay que matizar que la retransmisión, realizada vía streaming, se han utilizado medios propios de ellos, sin estar presentes ninguna persona o empresa externa a la orden. Además esta zona, al igual que el resto de estancias, sin de carácter privado y pertenecientes a esta entidad.
Este suceso ha causado una especial indignación entre los vecinos que estaban siguiendo la misa desde sus balcones, provocando una fuerte cacelorada de protesta a los agentes. Finalmente pudo reanudarse, ya en el interior de la capilla del templo.
Por el momento, la Policía no ha dado a conocer su versión de los hechos, y por ende, si ha exisitido una denuncia previa.
