La Hermandad del Silencio ha culminado la restauración de las pinturas murales de la iglesia de San Antonio Abad, además de la incorporpación de una nueva iluminación.
Tras estos trabajos, el pasado sábado 21 de septiembre la apertura de nuevo al culto, en su horario habitual.
Un proyecto empezado desde 2012
Estas labores han consistido en primer lugar en la eliminación de los diferentes estratos de cal situados sobre las mismas. Seguidamente se procedió a la reintegración de su policromía y la aplicación diferentes técnicas conservativas.
Desde el año 2012 han estado realizándose estas tareas, compuestas en varias fases y han sido llevados a cabo por el equipo de restauración dirigidos por los restauradores Javier Barbasán y Camila Casotti.
Cabe recordar que estas pinturas fueron realizadas por Juan Espinal, que datan de mediados del siglo XVIII.
Fotogalería
Fotografías: Carlos Iglesia.
