La O: 450 años de historia y su unión con Triana y Sevilla

Avatar de INRIPublicado por

El próximo sábado 29 de octubre la Virgen de la O realizará una salida extraordinaria con motivo del CDL Aniversario de sus primeras Reglas, por las calles del viejo arrabal trianero. Se trata del culmen de una efeméride que la Corporación del Viernes Santo viene celebrando en este presente año.

Sus orígenes: el Hospital de Santa Brígida

Los orígenes de la Corporación radican en la iglesia del antiguo hospital de Santa Brígida, sita en la calle Castilla, en el año 1560. Años más tarde, en 1566 se aprueban las primeras Reglas fundacionales tras la fusión de la Corporación hospitalaria y la penitencial, y ratificadas en 1589.

En ellas figuraban que su Estación de Penitencia se establecía en la noche del Jueves Santo, con túnicas negras con carretilla de plata, procesionando con un estandarte negro, un Crucifijo y la Imagen de una Dolorosa. Esta devoción fue en aumento conforme pasaban las décadas.

El siglo XVII: el Santísimo Sacramento, la procesión del Resucitado y el Nazareno

El arzobispo Monseñor Pedro de Castro otorgó a la iglesia de la O la potestad de poder administrar el Bautismo a sus fieles, en ayuda a la Real Parroquia de Santa Ana, aunque derivó en diversos pleitos con los propios clérigos de la ‘Catedral de Triana’.

Existe documentación de la época, la cual la Hermandad realizaba su Estación de Penitencia el Viernes Santo a Santa Ana, con la Imagen de la Dolorosa portada en andas y el Crucifijo en un cortejo integrado por hermanos de luz y sangre,  quedando éste depositado en el lugar. Incluso la propia Corporación encargó a Alonso Rodríguez la realización del Monumento, para su instalación durante los Santos Oficios del Jueves y Viernes Santo.

Los hermanos no regresaban a Santa Ana hasta el Domingo de Resurrección y volvían a su Templo el Crucificado reconvertido en un Resucitado, acompañado por música, cantores y danzas y clérigos del convento de la Victoria. El progresivo deterioro de la Talla de papelón obligó a la Corporación a encargar una nueva Imagen de Resucitado en 1618 por Pedro de la Cueva y encarnada por Amaro Vázquez.

La primitiva efigie fue objeto de numerosas restauraciones a lo largo del siglo XVII, hasta que se decidió retirarla del culto. En un Cabildo de Hermanos de 1685 se designó que el nuevo Titular debería ser un Nazareno con la cruz a cuestas, ya que con motivo de la estrechez de la puerta de la iglesia y la poca altura del dintel, el paso debía armarse un día antes en la propia calle, a la espera de su salida procesional.

Este Nazareno fue encargado a Pedro Roldán y policromado por Miguel Parrilla en 1686, siendo el actual Titular de la Corporación, además de un paso procesional tallado por Miguel Franco. Años antes, en 1678, ejecutó una nueva mascarilla para la Virgen de la O.

El siglo XVIII y XIX: la nueva iglesia y su Estación de Penitencia a la Catedral de Sevilla

Las continuas riadas que sufrió la calle Castilla por su proximidad al río, obligó a la reedificación de la iglesia. Estas gestiones se iniciaron en 1697, culminando con la nueva sede en 1702. Décadas más tarde, en 1755, recompuso la torre.

Durante el siglo XVIII y primer tercio del XIX la cofradía no hizo su Estación de Penitencia de manera ininterrumpida, por causas políticas, sociales y económicas de la época. En 1785 son aprobadas las nuevas ordenanzas de la Hermandad con el Consejo de Castilla, manteniendo así sus cultos.

En 1830, la Corporación toma una decisión histórica que marcaría un antes y un después en la Semana Santa hispalense y trianera. Hizo Estación de Penitencia a la Santa Iglesia Catedral cruzando el puente de barcas. Años más tarde, siguen el mismo camino las Corporaciones de la Encarnación (hoy San Benito), la Esperanza de Triana y el Cachorro. Dada su inestabilidad, su estructura fue demolida y se construye el puente de Isabel II, más conocido como puente de Triana.

El siglo XX: la Guerra Civil y la nueva Dolorosa de Castillo Lastrucci

En 1936, la Hermandad de la O fue víctima de la barbarie durante los sucesos acaecidos en Guerra Civil.

La parroquia de la O fue asaltada por un grupo de individuos, consiguiendo las llaves en la casa del párroco tras sufrir una brutal agresión. Sacaron los Titulares de la Hermandad a la calle Castilla a la calle y fueron salvajemente mutilados e incluso sacaron sus propios ojos. La Imagen de Nuestro Padre Jesús Nazareno pudo ser recuperada y restaurada por Antonio Castillo Lastrucci, al igual que la Virgen de la O Gloriosa. La Dolorosa en cambio, ante los daños sufridos que fueron irreparables, la Corporación decidió sustituirla por la actual, obra de Antonio Castillo Lastrucci en 1937.

Años más tarde, en 1943, la Corporación sufrió otro serio percance. Durante su salida en su discurrir por Callao, un tranvía con ruta Sevilla-Camas atropelló a la comitiva por un fallo en los frenos, precipitándose sobre el paso de palio. Por fortuna, no se tuvo que lamentar, daños personales, ni por parte de la banda de música, ni cuadrilla de costaleros ni del público asistente. Los propios hermanos pudieron rescatar a la Virgen, sin daños de consideración, aunque el paso quedó seriamente dañado. Al año siguiente, la Corporación pudo hacer su Estación de Penitencia ya con su paso ya restaurado.

Las siguientes décadas en la Corporación han sido de absoluta estabilidad y crecimiento hasta la llegada de nuestros días.

Siglo XXI: la Coronación Canónica de la Virgen de la O

Sin duda, los primeros años del siglo XXI cabe destacar la Coronación Canónica de la Virgen de la O.

El 2 de junio de 2007, la Dolorosa de Castillo Lastrucci fue trasladada en su paso de palio a la plaza del Altozano. En el lugar se celebró una Misa Pontifical, oficiada por Monseñor Carlos Amigo Vallejo, la cual fue coronada. Seguidamente realizaría una salida Extraordinaria por las calles del viejo arrabal trianero.

Deja un comentario